Pelan y cortan 2 cebollas por la mitad. Cortan luego en plumas, es decir, en perpendicular a las puntas. Tranqui, si miras el video se entiende perfecto.
Van a pelar 1 kilo de papas (en mi caso eran 6 porque las elegí más chiquitas). Cortan al medio a lo largo y en rodajitas de a 1/2 dedo.
Fríen las papas y las van dejando en un colador. Pueden reforzar después con papel de cocina si quieren.
Por otro lado, cocinan las cebollas suavemente y con sal. Que se pongan de un colocito dorado pero que no se pongan crocantes. Fuego bajo, sal desde el principio y revolver. Larga su líquido, se va caramelizando sin agregarle azúcar. La cebolla solita se encarga.
Rompen 4 huevos y 2 yemas. Mezclan.
Ahora van a agregar las papas, la cebolla y sal si hiciera falta.
Mezclan bien. Que todo se integre.
Ponen en una buena sartén aceite de oliva, vuelcan la mezcla y cocinan entre 1 y 2 minutos de un lado. Esto también es a gusto.
Dan vuelta con la ayuda de un plato y una espátula y de nuevo de 1 a 2 del otro lado. Mamita querida, que buena quedó.
Lista para comer en el momento. Al día siguiente o al rato también va a estar buenísima pero el punto babé va a perderse cuando recalienten.